Multan con 4.200 euros a un restaurante que repartía comida gratis a familias desfavorecidas durante el confinamiento
La Policía local de Valencia ha sancionado con varias multas al restaurante La Lusitana Vasca por haber estado repartiendo comida de forma gratuita a familias necesitadas durante el confinamiento en el barrio de Cabanyal.
La policía local de Valencia ha sancionado con varias multas que ascienden a los 4.200 euros a Javier Márquez, propietario del restaurante La Lusitana Vasca y a dos vecinas voluntarias por repartir comida de forma gratuita a más de 80 personas necesitadas del barrio del Cabanyal durante el confinamiento.
El restaurante recibió primero dos multas de 600 euros y después una que ascendía a 3.000, pero tanto Márquez como las dos vecinas voluntarias se niegan a pagar la multa ya que no estaban haciendo nada que incumpliesen las normas establecidas por el Gobierno durante el estado de alarma.
Ante la prohibición de abrir al público salvo para realizar entregas a domicilio, decidieron ayudar a las familias con menos recursos del barrio: "El BOE permite esta entrega de comida sin ánimo de lucro; la hicimos a través de dos asociaciones, Brúfol y Espai Veïnal Cabanyal", explica el dueño del local al diario Las Provincias.
Los hechos sucedieron el pasado 17 de marzo, donde sirvieron un total de 84 raciones de comida: "Venía una persona de cada familia, manteniendo la distancia de seguridad. Todos nosotros llevábamos las EPIS", asegura Márquez al mismo medio, añadiendo que tuvieron en cuenta "las medidas de higiene, seguridad y distanciamiento social" que se requeridas.
Según las declaraciones de Márquez, a pesar de que el uso del local fue exclusivo para recoger las comidas y repartirlas sin ánimo de lucro, asegura que uno de los agentes que fueron al restaurante les dijo "que haría todo lo posible para que le cerraran el negocio", además de increpar a las voluntarias.