LE HA COSTADO MÁS DE 11.000 EUROS

Aprueba el carnet de conducir después de 25 años y 33 intentos

Christian Whiteley-Mason ha tardado 25 años en sacarse el carnet de conducir. Tras 33 intentos fallidos y haber tenido a 14 profesores diferentes, este británico de 42 años ha conseguido por fin aprobar el examen. Eso sí, ¡le ha costado una fortuna!

25 años para sacarse el carnet de conducir, ¿sabes cuánto se ha gastado? | Agencias

Europa FM

Barcelona 24/04/2018 15:51

Christian Whiteley-Mason, un británico de 42 años que vive en South Yorkshire, es un claro ejemplo de aquello de "quien la sigue la consigue", aunque seas nefasto para ello.

Christian se presentó por primera vez al examen de conducir en 1992 y no solo no lo aprobó esa vez, las siguientes 32 tampoco. Al parecer lo de estar al volante no se le daba muy bien, ya que en el primer examen se subió a la acera y se chocó contra una señal de tráfico.

Tras 56 clases, fue uno de sus profesores el que le dijo que "se diera por vencido porque nunca lo conseguiría". Y no era el único que creía eso: "Lo que pensábamos es que si se montaba en un coche, lo más normal es que tuviera un accidente", explica su marido Darren a The Mirror.

Por eso después de 32 intentos fallidos, haber tenido a 14 profesores diferentes y haberse gastado más de 11.000 euros; Christian decidió que conducir no era lo suyo y abandonó la idea de sacarse el carnet en 2003.

Pero con 40 años y por motivos laborales, Christian necesitaba disponer de coche propio para no depender de terceras personas ni gastarse una fortuna en taxis, así que volvió a intentarlo: "Todos se rieron de mí y me dijeron que nunca lo haría, pero estaba absolutamente decidido", explica a The Mirror.

Y por sorprendente que parezca, después de tantos años sin haber dado clases aprobó a la primera: "No solo pasé a la primera, sino que solo fue con tres errores menores. ¡Estoy tan orgulloso de mí mismo! Para ser honestos esto ha cambiado mi vida porque sentí que había logrado todo lo que realmente quería lograr, esta era la única cosa que me quedaba por hacer".