Los extraños mensajes de Alejandro Sanz sobre falsas promesas y gente que juzga
El artista, que está en boca de todos por una posible relación con la actriz Mónica Cruz, ha publicado varios mensajes que han despistado a sus fans.
Alejandro Sanz es uno de los cantantes nacionales más parlanchines de las redes sociales.
En numerosas ocasiones ha recurrido a las plataformas para comentar puntos de vista o incluso revelar que no estaba pasando por una buena época a nivel personal. "A veces no quiero ni estar", decía a principios de verano, cuando sus fans se pusieron en alerta sobre el estado anímico del cantante de Corazón Partío.
Hace unas semanas cumplía 55 años y lo celebraba con una multitudinaria fiesta en una lujosa discoteca de Madrid, donde Mónica Cruz se convirtió en protagonista inesperada. Al día siguiente, los titulares sobre un posible romance entre ellos copaban la prensa.
Desde entonces, el de Moratalaz se ha convertido en el centro de atención. Muchos periodistas buscan confirmar su comentado romance con la actriz, ya que el interés por obtener sus primeras fotos juntos está por las nubes. Incluso se rumorea que planean pasar el Fin de Año juntos en la finca del cantante en Extremadura.
Sea como sea, esta madrugada, el cantante ha vuelto a volcar sus reflexiones en las redes sociales. Unos mensajes que aunque parecen inspiradores, esconden una enseñanza sobre lo que parece una traición. "Las primeras impresiones son las buenas porque son dos personas siendo ellas mismas. Después, esas dos personas empiezan a “intentar”,“comparar”, “juzgar”, “tratar”, “negociar”…y ya no son ellas… son el famoso: tu y yo", escribe el cantante.
Ser uno mismo y no fingir para obtener rédito o determinados intereses es imprescindible, tal y como deja claro en el siguiente post: "Solo digo que sería bueno ayudar a conservar quienes somos y cómo somos al principio. Sin intentar cambiarnos. Cuidar la frescura que tanto nos gusta por encima de la comodidad de que sean como queremos", escribe.
Termina con una frase tajante sobre las falsas ilusiones. "Deja de llenar mi cabeza de estrellas que no soy un cielo de verano".