Ezra Miller se disculpa por sus delitos y admite necesitar tratamiento psicológico
Ezra Miller se ha visto involucrado en varios delitos, como allanamiento de morada y robo de alcohol. El actor ha reconocido su responsabilidad y lo ha achacado a "problemas de salud mental complejos".
Duras semanas para el actor Ezra Miller, después de ser acusado de varios delitos como controlar a una menor de edad con alcohol y drogas, allanamiento de morada y robo de alcohol en Vermont. A esto se sumaría también una posible sospecha de que está detrás de la desaparición de una madre y sus hijos.
Ahora, el protagonista de The Flash ha dado un comunicado en exclusiva a la revista Variety, rompiendo su silencio por primera vez desde estas graves acusaciones.
Miller, a través de unas declaraciones a este medio, ha pedido disculpas por todo lo sucedido y lo ha achacado a "problemas complejos de salud mental".
"Habiendo pasado recientemente por un momento de crisis intensa, ahora entiendo que estoy sufriendo problemas de salud mental complejos y he comenzado un tratamiento continuo", ha admitido, manifestando que está recibiendo ayuda psicológica.
Además, ha sido muy claro sobre su posición al respecto en este polémico asunto: "Quiero disculparme con todos los que he alarmado y molestado con mi comportamiento pasado. Me comprometo a hacer el trabajo necesario para volver a una etapa saludable, segura y productiva en mi vida".
¿Peligra el estreno de 'The Flash'?
Después de esta decisión, se despejan muchas dudas sobre el futuro de la película The Flash que se iba a estrenar próximamente. Warner se estaba preparando para tres alternativas tal y como comentó The Hollywood Reporter. La primera parte de la base de que Ezra Miller ha dicho a Warner que buscará ayuda profesional tras regresar a su granja en Vermont.
Si esto ocurre, la película se estrenará en cines como estaba previsto y el actor podría dar una entrevista en algún momento explicando su comportamiento errático durante los últimos años, además, sería parte de la promoción de la película, aunque de manera limitada.
La segunda opción parte de la base de que Ezra Miller mienta y no busque ayuda. Warner lanzaría la película, pero sin contar con el actor durante la promoción y, por supuesto, la compañía no seguiría contando con él en futuros proyectos.
La tercera opción de momento no es plausible puesto que no sería bueno para Warner cancelar otra película y menos cuando esta ha costado 200 millones de dólares, pero, si la situación empeora, a la compañía no le quedará más remedio que renunciar a estrenar el filme.