UNA IMAGEN VALE MÁS QUE MIL PALABRAS

La foto que confirma que Kim Kardashian estropeó el vestido de Marilyn Monroe en la gala MET

Hay imágenes que valen más que mil palabras y esta es una de ellas. Casi dos meses después de que Kim Kardashian se enfundase en el mítico vestido de Marilyn Monroe para asistir a la gala MET 2022, unas fotos muestran que la empresaria estropeó el histórico diseño. Ahora le faltan piedras y la tela está desgarrada.

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Kim Kardashian, en la gala MET 2022 | Gtresonline

Europa FM

Madrid14/06/2022 09:52

El 19 de mayo de 1962 Marilyn Monroe le cantó Happy Birthday, Mr. President a John F. Kennedy. Lo hizo enfundada en un vestido excesivamente ceñido del diseñador francés Jean-Louis, que se terminó de ultimar sobre el cuerpo de la ambición rubia.

Para cerrarlo, tuvieron que coserlo por detrás y de ahí que durante la velada el vestido empezase a desgarrarse. Después de esa mítica actuación en el emblemático Madison Square Garden de Nueva York, nadie se lo volvió a poner. Marilyn Monroe murió tres meses después, el 4 de agosto de 1962, y el vestido pasó a formar parte de la historia de Estados Unidos.

Nadie lo lució de nuevo hasta que llegó la gala MET 2022 y Kim Kardashian decidió acudir a la cita con el histórico vestido. Tuvo que adelgazar casi siete kilos para poder hacerlo pero no consiguió que le sirviese y tuvo que apañárselas para cumplir su sueño de poder llevarlo. Las imágenes que salieron los días siguientes a la ceremonia mostraron que lo cerró con una lazada añadida a posteriori, y que disimuló que le quedaba pequeño con una faja del mismo color y un abrigo de piel blanco que cubría la parte trasera del vestido.

No fue suficiente para mantener el vestido a salvo. Unas imágenes publicadas esta semana en redes sociales muestran que el vestido de Marilyn Monroe se estropeó después de que Kim Kardashian lo llevara después de la gala MET.

Las fotos muestran el estado del vestido antes de la gala y el estado del vestido después de la gala. En la izquierda se ve que faltan algunos piedras y en la derecha, al lado de los corchetes de cierre, se ve que la tela está desgarrada.

Kim Kardashian solo se puso el vestido a la entrada del Museo Metropolitano de Nueva York. A fin de evitar estropear el histórico diseño, la empresaria se lo cambió por una réplica y así disfrutar tranquila de la ceremonia.

“Soy extremadamente respetuosa con el vestido y lo que significa para la historia estadounidense”, dijo a Vogue antes de la fiesta. “Nunca querría sentarme en él o comer en él o correr el riesgo de dañarlo y no usaré el tipo de maquillaje corporal que suelo usar”.