Puff Daddy sacrificó a un pájaro como parte de un ritual antes de un juicio
Un documental enfocado en la sentencia al rapero Shyne, apadrinado por Puff Daddy en los años 2000, ofrece nuevos detalles sobre algunos de los comportamientos del controvertido productor, que se enfrenta a un macrojuicio en el que se investigan abusos sexuales, tráfico de drogas y personas, entre otros delitos.
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Las polémicas continúan envolviendo la actualidad en torno a la figura de Puff Daddy, el productor estadounidense encarcelado mientras se investigan su participación en posibles casos de abuso sexual, tráfico de drogas y de personas, además de otros cargos, y en este caso incluso implicaría el sacrificio de un animal como parte de un ritual.
Tal y como refleja el portal TMZ, un guardaespaldas de Sean Combs, nombre real del productor, afirma que realizó el sacrificio de un pájaro apenas unas horas antes de ser absuelto de todos los cargos relacionados con un tiroteo en una discoteca en 1999.
El incidente acabó con Shyne, un rapero apadrinado por Puff Daddy y su sello Bad Boy Records a comienzos de siglo, sentenciado a diez años de prisión al ser declarado culpable de agresión, puesta en peligro a otros de manera imprudentemente y posesión criminal de una pistola. En este turbio episodio, narrado en el documental de Hulu The Honorable Shyne, también estuvo involucrado el productor, aunque finalmente quedó exonerado a pesar de haber sido acusado de soborno y posesión de armas y enfrentarse a una posible pena de 15 años de prisión.
Según las palabras del guardaespaldas, Puff Daddy se detuvo en Central Park durante su camino hacia la corte en la que se debía juzgar su participación en todos lo relacionado con el tiroteo para realizar este ritual. Tal y como indica, el productor salió al encuentro de un hombre que le estaba esperando con una Biblia en la mano y dibujó un círculo de fuego frente a un Puff Daddy arrodillado.
Tal y como recuerda el encargado de la seguridad, este individuo indicó a Puff Daddy que sacase un pájaro blanco de una jaula para, acto seguido, lanzarlo al aire, aunque terminó cayendo muerto al suelo para finalizar el ritual.
A lo largo del documental, Shyne llega a declarar que Sean Combs le utilizó como un chico expiatorio en el caso y afirma que todo fue parte de un complot "demoníaco" por parte del magnate.