TODO CAMBIÓ HACE 10 AÑOS

Rigoberta Bandini: "Decía que no era feminista porque yo no estaba enfadada con los hombres"

Rigoberta Bandini se ha convertido en un referente del feminismo y su canción Ay, mamá, en un himno. Lo curioso es que la artista de 31 años no siempre lo vio tan claro. Lo cuenta en una entrevista en la que revela que vivió un trauma porque se desarrolló muy pronto. "En realidad era muy infantil, y me di cuenta ahí de la presión que sentimos como mujeres desde que nuestros cuerpos se desarrollan y pasamos a formar parte del saco de las ‘deseadas".

Rigoberta Bandini canta 'Ay, mamá' en el Benidorm Fest 2022 | Gtresonline

Europa FM

Madrid11/04/2022 16:46

Rigoberta Bandini fue una de las sensaciones del Benidorm Fest. Ay, mamá no logró convertirse en la canción representante de España en Eurovisión 2022, pero se convirtió en un himno feminista y la propia Rigoberta en un referente.

De eso ha habla la catalana en su entrevista con El Español con motivo de la publicación de su libro Vértigo (Verso&Cuento), un diario libre y atropellado de pensamientos que escribió hace un par de años cuando andaba aterrada por la crisis de los treinta.

Rigoberta Bandini, de 31 años, se sincera en este encuentro y habla de por qué no siempre defendió el feminismo.

"Descubrí el feminismo hace relativamente poco, hace diez años, como a los veinte. Y me di cuenta de la de cosas que nos quedan por luchar; y de que el discurso de que somos enemigas las unas de las otras era patriarcal y falso", apunta la artista, quien insiste que las mujeres "no tenemos ningún problema". "Unidas somos más fuertes, y todo esto… sé que puede sonar muy panfletario, pero a mí el feminismo me ha dado mucho poder", apunta.

"Siendo más joven decía que no era feminista porque yo no estaba enfadada con los hombres: no entendía nada (ríe). Me parecía como de amargada".

Bandini confiesa que siendo más joven decía que no era feminista: "Yo no estaba enfadada con los hombres: no entendía nada (ríe). Me parecía como de amargada. Es lo que me habían vendido. Después entendí que no cabía la posibilidad de no ser feminista. Es unirnos en la lucha y en la celebración, en la educación… es fascinante".

Sexualizada desde los 12 años

Con 12 años, Rigoberta Bandini ya estaba desarrollada y eso fue un trauma para ella. Tenía cuerpo de mujer pero en realidad era una niña que jugaba con muñecas.

"A los doce años ya tenía mucho pecho y me sentí como forzada a ser mujer desde muy niña. Y en realidad era muy infantil, y me di cuenta ahí de la presión que sentimos como mujeres desde que nuestros cuerpos se desarrollan y pasamos a formar parte del saco de las ‘deseadas’, de las ‘posiblemente follables’, de las sexualizadas", denuncia la artista.

"Desde que nuestros cuerpos se desarrollan y pasamos a formar parte del saco de las ‘deseadas’, de las ‘posiblemente follables"

"Es traumatizante. Y para mí fue traumatizante el hecho de darme cuenta de que era una mujer, porque no me sentía para nada así: ¡jugaba todavía con muñecas y ya notaba que la mirada de la sociedad hacia mi cuerpo era otro! ¿Qué coño es esto…? Luego me he ido reconciliando con esto", cuenta la cantante para la que hoy ser mujer sigue siendo un coñazo.

Se refiere a momentos concretos: "Cuando estás en un lugar donde hay dos hombres de 60 años, por decirte edad adulta, madura, y estás tú: hablan entre ellos (se ríe). Me siento muy pequeña".

Rigoberta, lejos de la Paula de hace 10 años

Rigoberta Bandini cuenta en la entrevista que no tiene mucho que ver con la Paula Ribó (Rigoberta Bandini es su nombre artístico) de hace 10 años. Esa Paula no defendía el feminismo que ahora abraza Rigoberta y tenía una idea distinta del amor.

"Si pudiera volver atrás, le diría a la Paula más joven que se tranquilice. En el sentido de: yo he sido mucho de tener novios, y oye, lo he disfrutado mucho porque soy muy enamoradiza, nadie me ha obligado, pero si pudiera volver atrás habría tenido más momentos de soledad porque creo que son muy enriquecedores. He sentido una presión extraña sobre esto, como si fuese más completa con otra persona, y eso era una puñetera mentira", apunta la cantante, que hoy vive una vida mucho más asentada.

"Si me oyera la Paula de hace diez años, diría: vaya coñazo de persona"

Pareja del actor cómico y músico Esteban Navarro Dordal y madre de un niño, Nico, de un año y medio. Hoy prefiere quedarse un sábado en familia que irse de copas con sus amigas.

"A veces pienso: 'Si me oyera la Paula de hace diez años, diría: vaya coñazo de persona', pero lo que más me gusta, en realidad, es estar con mi hijo y con mi pareja un sábado. No hay plan más invencible. Es el máximo planazo de mi vida ahora mismo. Tenemos mucho curro, conciertos… y cuando puedo hacer eso, ir a desayunar fuera con ellos, pasear, jugar… me encanta", añade la artista que en la entrevista apunta que en la entrevista hace otra revelación muy personal: "Siempre había dicho que no me quería casar y ahora estoy prometida".