¿Cuántos minutos debe durar la siesta perfecta?
Los expertos desvelan cuánto tiempo tiene que durar la siesta para que sea efectiva
La siesta es una tradición muy típica en España. Especialmente, los más madrugadores empiezan su día pensando en ese placentero momento de descanso que, generalmente, se produce después de comer.
Según el estudio Biological Rhythms and Behavior, recogido por el diario AS, “la siesta es consecuencia natural del descenso de la sangre del sistema nervioso al digestivo que ocurre después de la comida. Es decir, la mayoría de la sangre del cuerpo se dirige al estómago para realizar una buena digestión. Por ello, después de la comida (que en España suelen ser copiosas) se produce una caída del estado de alerta”.
Cuánto debe durar la siesta perfecta
De acuerdo con el Instituto de Investigaciones del Sueño, el tiempo que debería durar una siesta “es bastante relativo”: “Hay personas que logran reponerse con tan solo 10 o 15 minutos, mientras otras no pueden hacerlo en menos de una hora o un poco más”. Sin embargo, el centro advierte de que cuando “el proceso de la siesta es superior a una hora, supone una fase REM”, es decir, la etapa que puede hacer que nos despertemos con pesadez, lentitud y somnolencia.
Por otra parte, una investigación de la NASA de la que se han hecho eco varios medios como ComputerHoy.com, suscribe que la duración ideal de una siesta para conseguir recuperar la vitalidad y mantenerla todo el día, está entre los 10 y los 20 minutos. Aunque, “la siesta que sirve para reiniciar totalmente nuestro cuerpo debe durar tan solo 26 minutos para poder despertar más activos”. A su vez, la agencia demuestra que si te tomas este tiempo harás que mejore tu rendimiento en un 34% y tu estado de alerta en un 54%.
Efectos de la siesta en nuestro cuerpo según su duración
Estos son los resultados, recogidos por La Voz de Galicia, que investigadores de la Universidad de Adelaide (Australia) describieron en base a la duración de la siesta:
- Siesta de cinco minutos: produce beneficios similares a los de no dormir nada.
- Siesta de diez minutos: produce mejoras inmediatas en todas las medidas de resultado (la somnolencia subjetiva, la fatiga, el vigor y el rendimiento cognitivo), y algunos de estos beneficios se mantuvieron durante 155 minutos.
- Siesta de veinte minutos: se asocia con mejoras que surgieron 35 minutos después de la siesta y duran hasta 125 minutos después de la siesta.
- Siesta de media hora: produce un período de deterioro del rendimiento inmediatamente después de la siesta, indicativo de inercia del sueño, seguido de mejoras que duran hasta 155 minutos después de la siesta.
Los beneficios de dormir la siesta
Estas son algunas ventajas de descansar y reunir energías para resistir el resto de la jornada:
- Amplía la capacidad de memorizar
- Aumenta las habilidades mentales
- Beneficia para la salud durante la vejez
- Contribuye a una mayor salud cardíaca
- Disminuye el cansancio
- Mejora la actividad física
- Mejora nuestro estado de ánimo
- Reduce el dolor muscular
El origen de la siesta
La palabra ‘siesta’ hace referencia a la sexta hora del día. Tal y como apunta la BBC, su origen se remonta al Imperio romano, donde se dividían el día en períodos de luz de 12 horas. Justamente, la sexta hora del día corresponde en España al comprendido entre las 13:00 horas de la tarde en invierno y las 15:00 horas de la tarde del verano.
Concretamente, en nuestro país, la siesta comenzó a popularizarse tras la Guerra Civil, ya que muchas personas trabajaban en dos empleos para mantener a sus familias. El horario laboral, tradicionalmente, era de 09:00 a 14:00, y se detenía dos horas para una pausa de almuerzo. Finalmente, la jornada se retomaba desde las 16:00 hasta las 20:00, y dicho parón, permitía a los trabajadores descansar o viajar después de terminar el primer empleo.