MÁS QUE UNA CUESTIÓN DE CALORÍAS

¿Qué engorda más, el vino o la cerveza?

Una copa de vino o una cerveza, ¿qué engorda más? Esta es la gran duda que surge cada vez que salimos de bares y nos toca elegir. Te la resolvemos.

¿Qué engorda más, el vino o la cerveza? | Pixabay

Inés Romero

Madrid27/09/2021 07:01

Querer cuidarse no significa renunciar a los pequeños placeres como tomar una buena copa de vino o una cerveza bien fría. Lo que ocurre es que a veces uno no sabe qué elegir y piensa en las calorías. ¿Cuál de las dos bebidas es más calórica? ¿Qué engorda más, una cerveza o una copa de vino?

En Europa FM nos hemos propuesto ayudarte con esta elección y resolverte otras dudas en torno al tipo de vino (blanco o tinto) o las cervezas sin alcohol.

¿Qué engorda más, una cerveza o una copa de vino?

Si decidimos tomarnos una cerveza con alcohol o una copa de vino, hay que tener claro que vamos a sumar calorías que no aportan valor nutricional o lo que los expertos llaman como “calorías vacías”. Pero ¿cuál de estas dos bebidas engorda más?

Lo primero de todo es saber que el valor calórico de una bebida de este tipo depende de la graduación y del volumen de alcohol. Por lo tanto, cuanto mayor sea la graduación y el volumen, mayor valor calórico tendrá.

Aunque cada marca es diferente, generalmente el vino tiene una mayor graduación que la cerveza. Por ejemplo, el tinto suele rondar entre los 12 y 15 grados. En cambio, las cervezas que más se consumen en España lo habitual es que no superen los 6 grados.

Generalmente el vino tiene una mayor graduación que la cerveza

Si tomamos 100 ml de cerveza estaríamos sumando entre 40 y 50 calorías, mientras que 100 ml de vino supondrían alrededor de 70 calorías.

Por lo tanto, el vino engorda más que la cerveza, ya que tiene más alcohol. No obstante, si nos tomamos una caña o un tercio estaríamos consumiendo más de 100 ml y, en consecuencia, serían más calorías que una copa de vino. Y esto en los mejores casos, porque cuando “salimos de cañas” suele caer más de una, además de las tapas que las acompañan.

  • Una caña doble - 350 ml - 140 calorías
  • Una copa de vino - 150 ml - 105 calorías

Igualmente, hay que tener en cuenta que las bebidas fermentadas contienen un alto contenido de carbohidratos. En el vino son la fructosa y la glucosa, que proceden de la uva, y en la cerveza, los granos de cereal.

Gemma Madolell Marín, dietista-nutricionista y miembro de la Comisión de Sanidad del Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de la Comunitat Valenciana (CODiNuCoVa), aclara que la edad, el peso y la composición corporal también influyen en la metabolización del alcohol. Lo explica: "Las mujeres generalmente estamos constituidas de forma que tenemos (a misma talla y peso que los hombres) un mayor porcentaje de grasa (necesario para funciones hormonales), y menor porcentaje de músculos y agua que los hombres. Por ello, al tener menos agua corporal, el alcohol se concentra con mayor facilidad en sangre”.

“La edad se relaciona con el nivel que nuestro hígado tiene para metabolizar sustancias tóxicas como el alcohol. A más edad, más tiempo se tarda en destruir esta sustancia, ya que las funciones hepáticas tienden a disminuir”, añade.

Otro factor importante es si la cerveza o el vino se mezcla con otra bebida. A pesar de que esto hace que contenga menos cantidad de alcohol, los refrescos tienen azúcar, por lo que seguirían engordando.

Tinto, rosado o blanco, ¿qué vino engorda más?

El vino blanco es menos calórico que el tinto | Pixabay

Tinto, rosado, blanco… existe una gran variedad de vinos y lo cierto es que no todos engordan igual. ¿Cuáles son sus diferencias?

Con los vinos sucede lo mismo que con la cerveza. Las calorías dependen, por un lado, de su graduación. La diferencia en este caso no es tanta, pero también influye. Así pues, generalmente los vinos tintos suelen tener una mayor graduación que los blancos o rosados, por lo que también tendrán más calorías.

No obstante, con graduaciones similares, los resultados cambian. El vino blanco contiene una mayor cantidad de azúcares simples que el tinto. Así, se recomienda escoger un vino viejo, superior a dos años, ya que tiene menos azúcar.

En cualquier caso, Madolell desmiente la creencia de que el vino es saludable: “El antioxidante llamado resveratrol se encuentra de manera natural en las uvas. Según estudios con animales, ayuda a bajar los niveles de colesterol malo. Sin embargo, para obtener sus efectos beneficiosos, la cantidad de vino que deberíamos ingerir por día sería desorbitada”.

¿La cerveza sin alcohol engorda?

Aunque cueste asumirlo, la cerveza engorda. Una caña pequeña supondría más de 70 calorías y un tercio alcanza las 150. Ahora bien, y si la cerveza es sin alcohol, ¿engorda?

Las llamadas cervezas “sin alcohol” engordan porque realmente contienen alcohol, aunque menos del 1%, tal y como estipula la ley. No obstante, su valor calórico es inferior a una “con”, puesto que ronda entre las 20 y 24 calorías.

Aunque, sin duda, la opción más beneficiosa para mantener la línea es la cerveza que en su etiquetado pone 0,0, ya que estas están totalmente exentas de alcohol. Este tipo de bebida tan solo tendría entre 12 y 23 calorías.

Igualmente, la nutricionista recuerda que la tradición cultural que se ha desarrollado en relación a beber cerveza y vino “es un mal habito”, no solo porque engorda, sino porque propicia otras enfermedades. “Debemos tener claro, como declaró la Organización Mundial de la Salud en 2008, que consumir alcohol en cualquier cantidad es nocivo para la salud”.