Holanda gana Eurovisión 2019 y España se queda en el puesto 22 de 26
Holanda era uno de los favoritos de la 64ª edición de Eurovisión. Y los pronósticos se han cumplido: su representante, Duncan Laurence, se ha coronado ganador de la gala con el tema Arcade, con 492 puntos. Por otra parte, Miki Núñez, el representante de España, no ha podido escapar de la maldición de los últimos puestos. La Venda ha obtenido 60 puntos y se ha posicionado en el puesto 22, uno por encima de Alfred y Amaia.
El holandés Duncan Laurence se ha declarado vencedor con 492 puntos de la sexagésimo cuarta edición de Eurovisión con 'Arcade', una balada "soul" de corte intimista y arreglos electrónicos que otorga a este país su quinto triunfo en el Festival Europeo de la Canción, el primero desde 1975.
El último país en actuar en la gala, celebrada en el recinto de Expo Tel Aviv de esta ciudad israelí, ha sido España, con Miki. El artista ha acabado con su tema La Venda en vigésimo segundo lugar con 60 puntos, el mismo resultado de Barei en 2016 y un puesto por encima de Alfred y Amaia el pasado año, con lo que tampoco el catalán ha escapado a la maldición de los últimos lugares.
Uno de los momentos más esperados de la noche ha sido la actuación de Madonna, que ha reivindicado que "El poder de la música es unir a la gente", palabras que algunos han leído en clave de defensa frente a las críticas que le han hecho por realizarse en Israel.
La artista ha revivido Like a Prayer, el sencillo que revolucionó el mundo hace 30 años gracias a un incendiario videoclip en el que besaba a un Jesucristo negro, momento que sin embargo no ha recuperado esta vez.
Seguidora de la Cábala (en la tradición judía, sistema de interpretación místico y alegórica del Antiguo Testamento), quizás la diva ha preferido recatarse en su "show" en Expo Tel Aviv, a escasos 70 kilómetros de Jerusalén, de Belén y en general de todos los rincones que comprenden la vida y muerte del mesías católico.
Concluido el turno de actuaciones a concurso, Madonna se ha subido al escenario para dar inicio a un "show" de 9 minutos de duración que ha arrancado con la reinterpretación de su citado clásico, en clave de coral eclesiástica y junto a 30 acólitos de su propio culto que, vestidos con túnicas, la arropaban en una gran escalinata.
Después ha llegado el estreno en directo de su más reciente tema, el "dancehall" jamaicano Future, en el que reflexiona sobre el mundo en el que vivimos, esta vez con su cuerpo de baile ataviado con máscaras de gas.
Se trata del cuarto tema que lanza del que será su próximo lanzamiento discográfico, Madame X, el cual verá la luz el 14 de junio y la embarcará en una gira mundial de presentación que, de momento, solo la ha llevado a ofrecer dos actuaciones estelares, una hace dos semanas en los Billboard Awards junto a Maluma, y esta de Eurovisión.
La cacareada participación en el Festival Europeo de la Canción ha sido fruto de una larga cadena de rumores y desmentidos desde que el pasado mes de febrero se anunció que la costearía el multimillonario canadiense israelí, Sylvan Adams, el mismo que llevó el Giro de Italia a Israel.
Cerrado ese acuerdo, que se estimó en un millón de dólares (890.973 euros), quedaba pendiente aún por concretar otro relativo a la Unión Europea de Radiodifusión y los derechos de transmisión de uno de los dos temas que había de interpretar en la gala, Like a prayer.
Aún así, el pasado martes la estrella llegó a Tel Aviv tras volar junto a un séquito de cerca de cien personas. Algunas informaciones apuntaron entonces a que cuando el jueves acudió al ensayo de su actuación, se encontró la puerta cerrada del recinto por orden del supervisor ejecutivo del evento, Jon Ola Sand.
Finalmente este dio el visto bueno para que Madonna pudiera acceder al recinto, después de que su equipo amenazara con cancelar la actuación, que no se confirmó oficialmente hasta la noche de ese día y que se ha convertido en uno de los momentos más esperados de esta edición.
"Sois todos campeones, llegar aquí no es fácil, primero porque tenéis un sueño por el que luchar. En mi opinión, eso os hace vencedores, independientemente de lo que pase", ha dicho la cantante en unas palabras expresamente dirigidas a los 26 participantes de la final.
Otro de los momentos destacados de la gala ha sido la actuación de grandes caras conocidas del festival, como Conchita Wurst, Mans Zelmerlow,Eleni Foureira y Verka Serduchka que han interpretado canciones exitosas que se han dado a conocer gracias al festival.