SE ACABÓ EL SUFRIR

Abren una clínica en Australia que te quita la resaca en 30 minutos

¿Cuántas mañana te has lamentado de haberte pasado con la bebida la noche anterior? ¡Pues eso se acabó! Han abierto una clínica en Australia que aseguran poder liberarte de la fatídica resaca por un módico precio en tan sólo 30 minutos.

Imagen no disponible | Atresmedia

Europa FM

Barcelona16/12/2015 14:31

Se acabaron los ibuprofenos, los cafés con sal y los mil inventos para intentar acabar con la terrible resaca. Si te pilla de paso ir a Australia puedes pasarte por Hangover Clinic, la primera clínica cuyos especialistas prometen quitarte la resaca ¡en media hora!

La clínica ubicada en Surry Hills, a las afueras de Sidney, ofrece varios tratamientos que van desde los 91 a los 141 euros y que van desde los 30 minutos a una hora, dependiendo del estado de nuestra resaca.

El secreto consiste en un tratamiento compuesto por un cóctel de vitaminas B y C, una solución isotónica intravenosa y un fármaco para el dolor de cabeza o las náuseas, todo ello mientras el paciente lo recibe en un cómodo sofá.

Tal como puede leerse en su página web, la clínica promete que "en tan solo 30 minutos te levantarás del sofá fresco y listo para afrontar el día, bien para salir con los amigos, para una ocasión especial con la familia, una apretada agenda de reuniones o simplemente para que puedas sentirte como la mejor versión de ti mismo" y propone tres tratamientos:

- Jump Start: 30 minutos. Para los que no debieron tomarse esa última copa.

- Energise: 40 minutos. Para dar energía extra a nuestro organismo.

- Resurrection: 1 hora. Para las noches más épicas y poder hacer frente a la tristeza post-fiesta de la mejor manera.

Como era de esperar no han tardado en surgir críticas hacia la clínica de quienes aseguran que la resaca precisamente es un recordatorio de haberse sobrepasado con el alcohol y que este tipo de tratamientos incentivan el consumo de alcohol en exceso.

Por su parte, Max Petro, fundador de Hangover Clinic, respondió a estas críticas en una entrevista a la televisión neozelandesa 3 News: "No hay ni una sola persona que beba compulsivamente en nuestra clínica. Nuestra tarea es asegurarnos de que la gente pueda seguir con su día a día".