EVÍTALOS

Estos 10 errores poniendo un preservativo son más frecuentes de lo que puedas imaginar

¿Crees que sabes poner un condón a la perfección? Pues estás equivocado. Seguro que, como nos cuenta El Sextante, has cometido alguno de estos errores al colocar un preservativo. ¡Te contamos cuáles son!

Mujer abriendo un preservativo | Agencias

Europa FM

Madrid 14/06/2017 18:44

Poner un preservativo, pensaréis, no es nada complicado. Lo pones una vez y las siguientes ya eres todo un profesional. ¡Pues no!

Aquí van los diez errores más frecuentes a la hora de poner un condón:

1. El condón está caducado (y aún así lo usas)

De repente lo necesitas y echas mano al condón que llevas en la cartera… el que lleva ahí más de una década, por si las moscas. Pues que sepas que se multiplican las posibilidades de que esté en malas condiciones y que, por tanto, se acabe rompiendo.

2. Abres el condón con los dientes, tijeras o cualquier utensilio que pilles

Hay un espacio en el lateral del envoltorio que está hecho para que solo sea: rasgar y sacar. Prueba ahí con los dedos antes de recurrir a objetos punzantes. ¡Piensa con la cabeza por un momento por Dios!

3. Eliges mal la talla

Puede pasar por desconocimiento, o porque quieres llevar un XL sin necesitarlo... ¡Ojito! porque, si tu pene no lo llena se acabará deslizando y dejándote al natural.

4. Lo desenrollas totalmente antes de ponértelo

No se sabe por qué hay seres humanos que hacen esto y tampoco sabemos cómo consiguen ponérselo después. Un poco locura, ¿no?

5. No lo desenrollas totalmente (una vez puesto)

NO. No dejes arrugas. Asegúrate que de está totalmente estirado a lo largo del pene, una vez puesto.

6. Te lo pones antes de estar en erección

MAL. Espera a que la cosa esté dura y entonces procede, pero antes no...

7. Te lo pones al revés

Ves que no desenrolla y le das la vuelta. Esto que parece un pequeño fallo puede ser un problemón si ha habido abundante secreción preseminal previa porque habrás empapado la parte interior que ahora, tachán, pasará a ser la exterior y estará en contacto con la vagina. Si esto pasa, mejor coger uno nuevo. Para los que lo ponen al revés: sabed que hay condones con una especie de “camino indicador” de por qué lado hay que colocarlo.

8. No aprietas la puntita

La punta del condón no es algo decorativo, sino que está ahí para recepcionar el semen tras la eyaculación, así que, si no quitamos el aire apretándola mientras nos ponemos el preservativo, corremos el riesgo de que desborde. Y ¡PUM!

9. Tras la eyaculación, no lo sacas rápidamente

Y entonces, la cosa se pone blanda y el condón se cae hacia el interior de la vagina o quién sabe dónde… Con lo fácil que es sacarlo (agarrado, siempre) tras haber llegado al orgasmo...

10. Lo reutilizas

Si solo tienes uno y ya lo has utilizado, su destino es el cubo de la basura. SIEMPRE. No cabe la posibilidad de reutilizarlo. O sino, busca una farmacia de guardia. Tú eliges, pero, por lo más grande, nunca le des un segundo uso a ese cacho de látex.