SINCERA ENTREVISTA

Lola Indigo habla de sus trastornos de alimentación: "Me dijeron que si quería seguir trabajando tenía que estar delgada como un palillo"

La cantante charla en una entrevista con El País de los problemas con la alimentación que sufrió en sus primeros años de carrera. También aborda temas como la fama y su verdadera personalidad tras su alter ego Lola Índigo.

Lola Índigo y RVFV cantan 'Trendy' y 'Romeo y Julieta' por primera vez en directo en la gira 'El Dragón'

Así ha sido el concierto de Lola Índigo en el WiZink: temazos de todos sus discos y Quevedo y Belén Aguilera como invitados

Lola Indigo | Gtresonline

Europa FM

Madrid22/05/2023 15:19

Con su tercer disco El Dragón se puede decir que ha tocado techo. Se lo ha trabajado desde sus inicios, constantemente. No le importó ser la primera expulsada de Operación Triunfo en 2017. Una vez terminó el concurso lanzó aquel Ya no quiero ná que se hizo terriblemente viral y justo en ese momento pasó de ser Mimi Doblas a autonombrarse y convertirse en Lola Indigo.

Pero Lola Indigo no está presente todo el rato. Hace una clara disociación entre persona y personaje. Lo ha contado en su charla con Beatriz García para la revista SModa de El País, donde también habla sin pelos en la lengua de la hipersexualización que ha sufrido y los problemas de alimentación que nacieron en sus primeros años de trabajo.

"En el escenario o grabando un videoclip es donde me transformo en Lola Índigo", dice la artista, que en cierto modo reconoce que es agotador mantenerse siempre en el rol de artista. "Yo siempre digo que Lola es la diva en el escenario. Luego en el día a día, en cualquier cosa fuera del espectáculo, soy Mimi porque tengo que salvaguardar mi tranquilidad y no estar siempre en alerta. No puedo estar siempre megaproducida y pensando todo el rato en lo que voy a decir", añade.

"¿Qué es un cuerpo normativo?, ¿una chavala que está muriéndose de hambre?"

No cree que las mujeres artistas tengan el mismo reconocimiento que los hombres en la música. "Lamentablemente, no. Hoy he visto un cartel de un festival y he dicho: "Esto es una vergüenza". La presencia de mujeres era mucho menor. Qué impotencia cuando luego tenemos que escuchar que exageramos o que estamos locas", asegura la artista, que es capaz de poner patas arriba escenarios tan potentes como el WiZink de Madrid o el Palau Sant Jordi de Barcelona con un incendiario show en el que baila, suda, disfruta y se deja la piel constatemente.

Muy relacionado con estas exigencias hacia el terreno femenino está la hipersexualización que sufren muchas artistas.

Lola Indigo ha protagonizado campañas de lencería y ropa de baño y sabe de lo que habla. "A mí, que hago campañas de biquinis, me dicen que no tengo un cuerpo normativo. ¿Qué van a pensar el resto de chavalas que lo lean? ¿Entonces, qué es un cuerpo normativo? ¿Una chavala que está muriéndose de hambre o una chavala superdelgada por constitución y que tú nunca vas a conseguir esa constitución porque no la tienes y punto? No, amor, tú come lo que te apetezca, sobre todo tienes que estar feliz", asegura.

Quiere trasladar a las niñas y jóvenes que la siguen un mensaje positivo, de amor propio y autoestima. Sabe lo necesarios que son porque en sus primeros años de carrera, cuando era estrictamente bailarina, recibió todo lo contrario.

Sus superiores le imponían un aspecto físico casi enfermizo para mantener su trabajo. "Lo mío empezó en China. Allí hay otra mentalidad. Me dijeron que si quería seguir trabajando tenía que estar delgada como un palillo. Me echaron de trabajos porque para ellos estaba gorda", cuenta.

Aunque lleva encadenando éxitos desde el primer día, su colaboración con Quevedo en El Tonto es la única canción que se ha colocado en el número 1 de las listas durante un par de semanas. Un éxito que le reconforta.

Ya era hora de que tanto esfuerzo tuviese su merecida recompensa. "Ha sido muy intenso porque siento que al oído de la gente he tenido muchos hits, pero nunca había sido número uno. Y es increíble tener esa recompensa después de cinco años. Lo digo desde el trabajo y no desde la arrogancia: me he esforzado mucho para conseguirlo. Me tiro muchas horas de estudio perfeccionando cosas", termina.

"
Cargando...