FUERA PELIGROS

Ocho prácticas sexuales sin riesgos de transmisión de infecciones

Los miedos, los peligros y las enfermedades nos impiden disfrutar al máximo de las relaciones sexuales. Por eso nuestros compañeros de El Sextante nos traen ocho prácticas muy hot sin riesgos de transmisión de infecciones. ¡Atento!

Sexo en la pared | iStock

Europa FM

Madrid 31/07/2017 14:52

El sexo está para disfrutarlo, pero muchos se plantean riesgos a los que podrían enfrentarse y no dan rienda suelta a su imaginación.

En muchas ocasiones se piensa en el placer y en los peligros que puedan ocurrir, pero pocas veces vemos las múltiples posibilidades que nos ofrece mantener relaciones sexuales.

Poner el punto de mira exclusivamente en el placer genera expectativas demasiado altas, teniendo solo en mente el orgasmo, mientras que enfocar el sexo en sus riesgos, genera muchos miedos.

Por ello, la sexóloga Sonia Ruíz ha planteado su visión sobre esto: “Limitar las respuestas sobre sexo a los riesgos me parece bastante pobre porque se reducen los encuentros eróticos a las relaciones de penetración usando conceptos como “sexo seguro” sinónimo de “uso de preservativo”. Se olvidan que en los encuentros hay muchas otras prácticas que no requieren del uso de preservativo para ser seguras”

Cuando hablamos de sexo pensamos simplemente en la penetración y no nos damos cuenta que detrás de eso hay muchas más opciones.

“Si la penetración es una práctica entre otras tantas, tendrá su tiempo, el mismo que cada una de las otras, ni más ni menos. Muchas de estas otras prácticas no solo están libres de riesgo sino que aportan además otros tantos beneficios. Estas prácticas son los que yo llamo a-conceptivos”, comenta la sexóloga.

Cuando hablamos de a-conceptivos nos referimos a las prácticas a través las cuales no puede haber riesgo de embarazo, por lo que, no hay penetración. Acariciarse, masturbarse (delante de tu pareja es muy excitante), petting, juegos eróticos, masajes, lamer, morder, susurrar... Es cuestión de echarle imaginación y tal y como explica Sonia Ruíz,“son diferentes formas de sentir placer en la totalidad del cuerpo”.

La principal ventaja de estas prácticas es que están libres de riesgos de transmisión de infecciones y embarazos. Además, crean un mayor conocimiento de nuestro cuerpo y del de nuestra pareja, dando pie a conocer mejor nuestros puntos de máximo placer.

"Esto contribuye a un mayor conocimiento de nuestro cuerpo y nuestras zonas erógenas, así como del cuerpo y zonas erógenas del otro, nos abren un abanico de posibilidades por explorar y explotar en busca de placer, tanto individual como compartido”, comenta la sexóloga.

Por tanto, atento a estos consejos, totalmente fuera de riesgos y ¡ponlos en práctica!