TOMA NOTA

Cómo disfrutar de un orgasmo de pezón paso a paso

¿Aún no sabes cómo disfrutar de un orgasmo de pezón? ¡Eso es porque todavía no sabes en qué consiste! ¡Apunta porque esto te va a ser muy útil!

Imagen no disponible | Atresmedia

Europa FM

Madrid 03/04/2017 18:28

Todos sabemos más o menos de qué nos hablan si nos dicen orgasmos vaginales, clitoridianos o mentales, pero, ¿de pezón?. La web de noticias más hot, elSextante, nos lo descubre.

Cada vez que mantienes relaciones sexuales te centras en llegar a la meta a través de alguno de estos orgasmos, o si puede ser con varios, mejor que mejor; pero a veces, en el pre, durante o post orgasmo no son los órganos sexuales los que aceleran la llegada del clímax. ¿No te has dado cuenta que en el calor de los preliminares, en la penetración o simplemente cuando estáis cambiando de postura, has sentido cómo tus genitales se estremecían de placer al acariciarte, lamerte, mordisquearte o al agarrarte los pechos? Pues tienes que saber, amiga, que seguramente estarías gozando de un orgasmo de pezón.

Esto no es nada nuevo. Desde hace décadas, numerosas investigaciones científicas han demostrado que este tipo de orgasmos son reales y fácilmente alcanzables. Al estimular correctamente, (sin manosear así porque sí), los pezones femeninos activan su corteza sensorial genital, la misma región cerebral que despertamos al excitar la zona vaginal, el clítoris o el cuello uterino. ¡Y magia! Ahí tienes un tipo de orgasmo sencillo, placentero y mucho más común de lo que te imaginas.

Es más, según demostró un estudio dirigido por el doctor Herbert Otto en 1988 aproximadamente, lejos de ganar por goleada el orgasmo clirotidiano frente al resto, casi un 30% de las mujeres encuestadas aseguraron haber experimentado el clímax a través de la estimulación de sus pechos al menos una vez en sus vidas. Pero, ¿cómo llegaron hasta él?

La mayoría de los sexólogos coinciden en señalar estos seis pasos como los básicos para conseguir que una mujer disfrute de un orgasmo de pezón y El Sextante nos los ha desvelado:

1. Acaricia la aureola: Con las yemas de los dedos, acaricia suavemente los bordes de las aureolas hasta ver que el pezón se pone erecto. Aprovecha para estimular el resto del pecho suavemente provocando placenteros escalofríos.

2. Presiona ligeramente la mama: Siempre de abajo arriba y de los laterales hacia el centro, procura cubrir la mayor parte de seno posible y apriétalo como si lo fueses a masajear. Haz esto durante varios minutos acompañando y combinando el agarre con el resto de pasos.

3. Lame los pezones: Circularmente, en el sentido de las agujas del reloj y siempre de abajo arriba. El orgasmo de pezón no es una ciencia exacta así que déjate guiar por sus peticiones y observa cómo se estremece de placer cuando haces una u otra cosa para asegurarte de que vas por el buen camino.

4. Mordisquea los pezones: Ojito, nada de hincar el diente. Recuerda que se trata de una zona muy sensible y no pretendemos provocar dolor sino despertar las sensaciones más orgásmicas de tu chica. Coloca el pezón entre tus paletos y ejerce una ligera presión mientras giras tus dientes alrededor del mismo. Suavemente y como si lamieses un caramelo que te gusta tanto que quieres morderlo, pero sabes que de hacerlo acabarás con el disfrute rápida y malamente.

5. Succiona: Sin hacer vacío. Los chupetones pueden ser divertidos, pero lo que queremos es seguir estimulando las áreas sensibles de los senos para ganar la carrera hacia el orgasmo. Objetivo que, dedicándonos a succionar como si sorbiésemos el final de un granizado, no vamos a lograr. Sorbe los pezones suavemente como si estuvieses saboreando un helado de cucurucho ayudándote de la lengua para relamer la punta del pezón en movimientos rápidos y estimulantes.

6. Apuesta por el caballo ganador: Una vez hayas detectado qué movimiento o combinación de varios es la que más le está excitando, ¡intensifica sin variar hasta llegar al final! Si ella siente esa esperada ovación cerrada en las paredes de su vagina como si hubieses estado estimulando su clítoris o cuello uterino, prueba gozada y conseguida.

Ya sabéis chicas, ¡mandad la noticia a vuestros chicos!